LA MISIÓN ANTES DE COMENZAR

Números 26:1-4 “Tomad el censo de toda la congregación de los hijos de Israel, de veinte años arriba, por las casas de sus padres, todos los que pueden salir a la guerra en Israel.”(V.2)

La misión más importante para el pueblo de Israel cuando se trasladaban, era trasladarse junto con el tabernáculo. Por eso fueron elegidos las personas para llevar esta misión cuando se dividían los terrenos para que al fin se levantara el templo. Esto es el sistema importante para disfrutar las bendiciones de estas plataformas, sanar las 237 naciones y levantar a las cumbres. Por eso debemos aferrarnos a esta misión sin falta. Cuando nos aferramos a esta misión ¿Qué es lo que vemos?

1. Ver por adelantado, poseerlo por adelantado y disfrutarlo por adelantado 

Veremos las respuestas por adelantado. Dios nos mostrará por adelantado el poder del trono celestial, la bendición de los 3 festivos y las evidencias del desierto. Cuando poseemos por adelantado el arca del pacto la cual es el atrio de los gentiles (237), el atrio de la oración (la sanidad), el atrio de los niños (la cumbre), con todo esto disfrutaremos de las bendiciones por adelantado del candelero (la luz), el altar del incienso (la oración), la mesa del pan (la vida), la fuente (el perdón del pecado), el aceite (la obra del Espíritu Santo), el atrio (el fuego). 

2. Conquistar por adelantado y el cumplimiento por adelantado 

Conquistaremos el pacto por adelantado. Los que recibieron estas bendiciones fueron Josué, Caleb (Números 14:1-10) y la ramera Rahab (Josué 2:1-16). Dios ya tenía todo cumplido. Todas las cosas están en las manos de Jehová y lo podemos ver en la confesión de David, él siempre creyó y actuó viendo por adelantado lo que Jehová había cumplido. Nosotros también debemos disfrutar de esto.

El horario lo tiene Dios en control por completo. Pero hay una única manera de cambiar ese horario. Esto es cuando nos aferramos a la misión correcta entonces hay restauración. Nuestro motivo principal no es fortalecernos con poder sino debemos aferrarnos a la misión necesaria de Dios. 

Dios, que no tengamos una oración en vano sino que seamos los testigos que ven las obras grandes de Dios. Oramos en el nombre de Jesucristo que nos da fuerza espiritual. Amén. 

2º Culto de la Iglesia Emanuel | 3.1.2021