LAS LAGRIMAS DE LOS DISCÍPULOS DEL EVANGELISMO – LOS LÍDERES QUE VIERON LA IGLEISA DEL FUTURO 

Romanos 16:23 | Os saluda Gayo, hospedador mío y de toda la iglesia. Os saluda Erasto, tesorero de la ciudad, y el hermano Cuarto.

Estamos en una época donde cada vez más se desvanece el Evangelio. Sin embargo, Dios utiliza las personas que lloran por causa del Evangelio y que conocen la razón de entregar sus vidas. A estas personas, no solamente les llegan las respuestas de la oración sino se levantan las obras de que se cumple la palabra a su favor. Es un acontecimiento que le ocurrió a Moisés también. Entonces, ¿qué tipo de líderes de la Iglesia tenemos que prepararnos para ser? 

1. Los líderes de la Iglesia que cambian el sistema 

Los líderes de la Iglesia tienen que estar en la corriente de “establecer en el Evangelio”. Aunque nuestro poder y nuestra fe parezcan una semilla de mostaza, si estamos dentro de la corriente del pacto, el poder y la fe que tenemos van a ser el árbol para el movimiento de la vida. Los líderes de la Iglesia cuando hablan, aunque sean unos detalles poco importantes, tienen que estar centrados en el Evangelio. Además los líderes se abstienen de ir a los lugares (los estados) que impiden el progreso del Evangelio y el cumplimiento de la palabra.

2. Los líderes de la Iglesia que cambian el concepto y el contenido 

Los judíos y los fariseos tenían los antiguos conceptos (costumbres) que no tenían más remedio que fracasar. Como resultado, ellos mataron al Señor Jesús en la cruz. En este momento, podemos ver que los líderes de la Iglesia de Mateo 28 se aferraron a la palabra de Dios como su pacto creyendo en toda la potestad del cielo y  la de la tierra y en hacer los discípulos a todas las naciones. También, las personas de Hechos 2 fueron los líderes ocultos de las 15 naciones. Ellos protegieron la Iglesia hasta el último momento y dieron sus ofrendas solamente para hacer la Evangelización. 

Un líder de la Iglesia debe de aferrarse al pacto para las Iglesias del futuro. Para ello, pueden formar los equipos que se conectan de corazón a corazón para establecer en el Evangelio. Podemos orar por las Iglesias en nuestra nación, en el mundo y por las Iglesias dependientes. 

Dios, permítenos que podamos encontrarnos con los equipos que nos conectamos de corazón a corazón. También te pedimos que podamos disfrutar del pacto para salvar las Iglesias del futuro y disfrutar de la bendición de la ofrenda. Oramos en el nombre de Jesucristo. Amén. 

1er Mensaje de la 4ª Conferencia Mundial de los líderes de la Iglesia | 11.12.2020