1, 3, 8 Y EL REMANENTE

Hechos 1:8

Hay algo que los y las Remanentes deben descubrir, y eso implica poseer tanto los talentos que Dios nos da como la misma fuerza que poseían los siete Remanentes (José, Moisés, Samuel, David, Eliseo, Isaías y Pablo) de la Biblia. Esto guarda relación con los pactos de solo Cristo, el Reino de Dios y la llenura del Espíritu Santo (Hechos 1:1, 3 y 8). El talento que nos ha dado Dios se convertirá en la solución para los tiempos finales. Cuando oramos con este talento, nos convertimos en la cumbre espiritual. Cuando disfrutamos de la bendición de la cumbre espiritual y nos centramos en nuestros estudios, alcanzamos la cumbre de los talentos. Por último, nos convertimos en la cumbre cultural cuando nos aferramos al misterio de la cumbre espiritual y a la cumbre de los talentos. Los Remanentes deben ver su futuro dentro de esto y convertirlo en parte de sus vidas. ¿Qué respuestas recibimos a continuación?

1. Descubrimiento – Solo, Unicidad, Re-creación

“Solo, unicidad y re-creación” ya han sido preparados. Todo lo que debemos hacer es descubrirlos. David descubrió las respuestas de “solo, unicidad y re-creación” cuando pastoreaba a su rebaño y José lo hizo cuando fue convertido en esclavo. Dios ya nos ha dado su poder a través de Cristo. Por tanto, la bendición del Reino de Dios está a nuestro alrededor. El poder de solo el Espíritu Santo también ha sido preparado en nuestro futuro. No importa lo trivial que sea la tarea, si descubrimos “solo” en ella, recibiremos la respuesta de la “unicidad”, y podremos desafiar para recibir la bendición de la “re-creación”.

2. Experiencia – Lo que es mío

Dios ya ha preparado lo que es nuestro. David descubrió y experimentó lo que Dios había preparado para él cuando era un pastor (Salmos 78:70-72). Nosotros simplemente necesitamos descubrir esta bendición en nuestra vida diaria. En lugar de buscar Gilgal, Jericó o Betel, Eliseo buscó la llenura del Espíritu Santo y una doble porción del Espíritu de Elías, que ya estaban preparadas. Nosotros también debemos descubrir lo que Dios nos ha dado y preparado dentro de nuestros estudios al mismo tiempo que nos aferramos a este misterio (2 Reyes 2:9-11). Después, con “solo, unicidad y re-creación”, experimentaremos el cumplimiento de la evangelización mundial a través de la ocupación que Dios nos da (Génesis 45:1-5).

3. Un testigo

Dios desea usarnos como sus testigos. Por tanto, Dios nos ha permitido disfrutar de respuestas que son inaccesibles para los reyes de nuestra época. Si alcanzamos en primer lugar la cumbre espiritual, Dios nos pondrá delante de los reyes de esta época para transmitirles la respuesta y, finalmente, testificar el Evangelio en todo el mundo. Para que podamos ser testigos de esta obra, debemos formarnos una visión del mundo adecuada que pueda salvarlo. También descubriremos nuestra visión dentro de los pactos de solo Cristo, el Reino de Dios y la llenura del Espíritu Santo, y tendremos sueños que se conecten entre sí a través de la oración de 24 horas. Por último, con las respuestas de Dios de “25 horas” y “eternidad”, que trascienden nuestras capacidades, crearemos una obra maestra que salvará a las 237 naciones.

Oración del evangelista. Querido Dios, permítenos descubrir “solo, unicidad y re-creación” que ya nos has dado, danos la respuesta de experimentarlas, y, por último, úsanos como tus testigos.