LA GRACIA ÚNICA QUE NOS HA SIDO DADA
Mateo 16:13-20
Ni siquiera los poderes combinados del emperador César y el rey Felipe pudieron acabar con el Evangelio. Lo mismo sucedió con el pueblo judío. Si estamos dentro del Evangelio, nada es imposible. Eso no significa que sigamos al éxito. Roma, que una vez había movido el mundo, no pudo derrotar al Evangelio, y en un periodo de 250 años, se rindió ante él. Pedro conocía esta verdad y confesó que Cristo todopoderoso era el Señor. ¿Qué pasará con las personas que confiesan a Cristo?
1. Cuando Cristo se convierte en nuestro Señor – Todos los problemas se solucionan
Pedro confesó que Cristo era el Señor. Cuando Cristo se convierte en el Señor de nuestra vida, todos nuestros problemas se solucionan y las fuerzas de la oscuridad se arrodillan. Después de que Pedro hiciera su confesión de fe, Jesús proclamó que levantaría Su iglesia sobre esa roca y las puertas del Hades no prevalecerían contra ella. Le dio a Pedro las llaves del Reino de los cielos y lo bendijo. Pedro era un pescador que no había recibido educación y que carecía de posesiones, pero su confesión se extendió por todo el mundo.
2. Cuando nos aferramos al Pacto de Cristo – Recibiremos las respuestas de Hechos 2:1-47
Un pequeño grupo gente que se reunió en el aposento alto de Marcos cambió al pueblo judío y salvó a toda la nación de Israel. Se aferraron al pacto de Cristo y perseveraron en oración (Hechos 1:14), y las respuestas que recibieron quedaron recogidas en Hechos 2. En el día de Pentecostés, se levantaron las obras del Espíritu Santo y la victoria quedó garantizada.
3. Porque una persona se aferró al Pacto de Cristo – Las puertas del evangelismo y la misión se abrieron
En el nombre de Jesucristo, Pedro levantó a un hombre cojo que estaba sentado junto a la puerta del templo, y grandes obras se levantaron en Samaria a través de Felipe. La Iglesia de Antioquía se levantó en medio de una gran crisis, y cuando la Iglesia Primitiva padeció persecuciones, los líderes de la iglesia se reunieron y oraron. Después, un ángel del Señor hirió al rey Herodes y expiró comido de gusanos. Más tarde, Roma fue conquistada a través de una única persona, Pablo. Las puertas del evangelismo y las misiones se abrieron debido a que una persona se aferró al pacto de Cristo.
Oración del evangelista. Querido Dios, déjanos confesar a Cristo todos los días y servirle como nuestro Señor. Por favor, levántanos como la figura principal que se aferra al pacto de Cristo para salvar el campo.