LA SEGUNDA ESTRATEGIA DEL EVANGELISMO (EL SISTEMA DE DISCÍPULOS) – UNA SUAVE VOZ
Hebreos 4:12
La segunda estrategia del evangelismo es el sistema. Muchos problemas, conflictos y crisis surgen cuando salimos al campo. En esas situaciones, debemos escuchar la suave voz de Dios para levantar el sistema y los discípulos. ¿Qué respuesta debemos recibir cuando nos fijamos en el ejemplo de la Iglesia Primitiva?
1. Esteban, el verdadero discípulo (Hechos 7:54–60)
La Iglesia Primitiva se enfrentó a grandes crisis y problemas, pero recibió la guía de Dios. Los discípulos se dispersaron debido a la persecución que se inició después de la muerte de Esteban. Esta persecución fue el comienzo de las respuestas. Esteban, el verdadero discípulo preparado por Dios, esperó su muerte como un mártir. Esteban fue un discípulo a quien Cristo aplaudió desde el trono. Como resultado, se estableció la Iglesia de Antioquía. Nosotros también debemos salir al mundo y encontrar a discípulos preparados por Dios.
2. La iglesia de Antioquía (Hechos 11:19)
Dios preparó a Bernabé y lo unió a Pablo, el evangelista que Dios usó para abrir la puerta de las misiones. Después, fueron testigos de la incomparable gracia de Dios y una multitud de discípulos se reunió. Sólo la iglesia de Antioquía recibió las bendiciones de Dios cuando se supo que vendría una gran hambruna en toda la tierra habitada. Recibiremos la misma respuesta que la iglesia de Antioquía si oramos para descubrir a uno de los verdaderos discípulos de Dios.
3. La comisión de un misionero (Hechos 13:1–4)
Pablo, que había perseguido a los seguidores de Jesús en el pasado, fue comisionado como misionero. Las obras de la iglesia del aposento alto de Marcos se están reproduciendo en la actualidad. Dios está a nuestro lado y obra a través de nosotros también en el presente.
4. Macedonia (Hechos 16:6–10)
Cuando parecía que la puerta de las misiones estaba cerrada para Pablo, Dios lo llevó a Macedonia y le permitió conocer a una discípula llamado Lidia. Adondequiera que vaya un verdadero discípulo, Dios le permite conocer a otros discípulos preparados.
5. Priscila y Aquila (Hechos 18:1–4)
Dios permitió que Priscila y Aquila, que habían sido expulsados de Roma, tuvieran un encuentro en Corinto con Pablo, que venía de fracasar en su obra de evangelismo en Atenas. Allí comenzó la respuesta del líder de la iglesia que ayuda al evangelista. Los discípulos preparados por Dios están completamente ocultos también en nuestros campos.
Oración del evangelista. Querido Dios, queremos ver lo que has preparado. Que hoy sea un punto de inflexión en el que descubramos la respuesta del evangelismo.