DESAFIANDO EL FUTURO

Hechos 19:21

Dios desea que desafiemos el futuro. Jesús nos prometió desde el principio que seríamos testigos, que nos daría evidencias y que estaría a nuestro lado a través del poder del Espíritu Santo. Somos personas que poseemos este pacto y que hemos llegado a la conclusión en Cristo, que ha derrotado a las fuerzas de oscuridad. Debemos tener plena seguridad en que haremos la evangelización mundial; por eso, no debemos caer en engaños durante este proceso. ¿En qué debemos desafiar?

1. Desafiar en las cosas que no están sucediendo

En general, cualquier cosa que no haya sucedido nunca se considera imposible. Por tanto, perdemos eso o nos aferramos a otras cosas. Sin embargo, hay una respuesta oculta aquí. A una situación como esta se enfrentó Pablo. Las seis puertas desde Asia hasta la escuela de Tiranno estaban cerradas, pero Pablo planteó el desafío correcto y, esa noche, mientras oraba profundamente, recibió la respuesta de Macedonia. Encontramos respuestas absolutas relacionadas con nosotros mismos, la iglesia, la familia o nuestro campo en cosas que no están sucediendo. Ninguna bendición es mejor que encontrar una respuesta en estas circunstancias. Hay un misterio detrás de cada puerta cerrada y debemos descubrirlo. 

2. Desafiar hacia la cumbre

Solo aquellas personas que son salvas pueden alcanzar la cumbre de la oración (cumbre espiritual). Debemos asumir tareas dentro de la bendición de sólo, único y la recreación que están dentro del poder de Dios (cumbre de los talentos). Después, recibiremos la respuesta de tener victoria sin necesidad de luchar (cumbre cultural).

3. Desafiar por el Evangelio, la realidad y cada fase

Debemos afrontar el desafío centrado en el Evangelio paso a paso y de un modo realista. El esclavo José se convirtió en primer ministro, Moisés pasó del Éxodo al Monte Horeb, David fue un pastorcillo que acabó como rey, Eliseo cambió su labor de agricultor por Dotán, y Daniel fue nombrado primer ministro tras un periodo de cautiverio. Jesús completó su ministerio público en el Monte Calvario, y sus discípulos, que fueron llamados al Monte del Olivar, se reunieron en el aposento alto de Marcos. Pablo tuvo victoria cuando se aferró al pacto en Antioquía, Asia, Macedonia y Roma. Este es el viaje del pacto que nos permite escapar de las fuerzas de oscuridad y reformar el reino de las tinieblas.

Oración del evangelista.¡Dios! Permite que lleguemos a la conclusión de sólo Cristo, y que vivamos en medio de cosas que suceden y dentro del viaje del pacto.