COMENZAR EN EL LUGAR QUE ESTÁ DESTRUIDO (LOS QUE QUEDAN)
Isaías 6:13 | Y si quedare aún en ella la décima parte, ésta volverá a ser destruida; pero como el roble y la encina, que al ser cortados aún queda el tronco, así será el tronco, la simiente santa.
Los israelitas estaban en un estado completamente destruido por las guerras y por las condiciones de estar dispersados. En aquel momento, Dios le dio a Isaías el pacto (Isaías 6:13). Aquellas personas, no eran solamente “los que han quedado” sino eran “los que quedan”. Aquí hay un valor sorprendente, lo que es inevitable. Dios nos llamó en los acontecimientos inevitables. En este momento, ¿a qué es lo que tenemos que aferrarnos?
1. Tener el triunfo “a causa de...”
A causa de los acontecimientos inevitables, podemos triunfar. Esto no es una consolación. A causa del diluvio, Noé tuvo el éxito. A causa de los egipcios malvados, José y Moisés tuvieron el éxito. A causa de las guerras, Samuel y David triunfaron. A causa de Babilonia, Ester, Daniel y tres jóvenes pudieron mover el mundo. A causa de un pequeño pacto al que nos aferramos, Dios abre las puertas de la evangelización mundial.
2. Los que quedan
Parece que estamos en un campo destruido pero existe el pacto que Dios nos da aparte. Es el pacto, y las personas con el Evangelio los que quedan. Son como aquellas personas que triunfaron a causa de Roma.
Los hijos de Dios solamente tienen que estar dentro del pacto. Sin duda, las obras de Dios se cumplen. Por lo tanto, no es que tenemos que esperar sino tenemos que disfrutar. Dios nos llamó como los testigos de esto. Cuando solamente nos aferramos al pacto, en nuestra vida vienen las respuestas.
¡Dios! Que descubramos el valor inevitable que viene de los conflictos y preocupaciones. A causa de estos conflictos y preocupaciones, que podamos triunfar en nuestra vida. Oramos en el nombre de Jesucristo. Amén.
Retiro para Obreros del campo de Nuevos Creyentes 2.do Mensaje (2) | 16.6.2020