LO QUE NADIE MÁS PUEDE HACER, “NOBODY”

Hechos 9:10, 15 | El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel (V. 15).

No hay nadie quien realmente pueda ayudarnos. De la misma manera, no hay nadie a quien realmente podemos ayudar. Para nosotros, como humanos, es absolutamente imposible, por lo tanto, Dios nos dio el pacto (Cristo), con el que todo es absolutamente posible. ¿Cuál es la razón por la que Dios obra con los Remanentes para que puedan hacer lo que nadie más (“Nobody”) puede hacer?

1. La preparación (el pasado) de Dios y la guía (el futuro) de Dios

Dios preparó a Pablo, quien era uno de los perseguidores, para que se convirtiera en un evangelista (Hechos 9:1-10). Para Saulo, Dios le mandó a Ananías, un discípulo que oraba en el campo. El pasado de Saulo fue el proceso de ser un instrumento escogido de Dios (Hechos 9:15). Ahora, ¿cuál es la razón por la que no tenemos que estar conformes con el día del hoy sino tener la seguridad del futuro? Es porque Dios nos guía. Dios selecciona los obreros de Cristo y les enseña los campos que tienen que ir (Hechos 13:1-3).

2. Dios comienza desde el día de hoy a través de los evangelistas

Nuestra impotencia o los problemas del campo no pueden bloquear el comienzo de Dios que está obrando el día de hoy (Hechos 11:19). A pesar de grandes tribulaciones, aquellas personas de la Iglesia de Antioquía se concentraron en las misiones (Hechos 11:20-23). La palabra fue proclamada y se levantó una gran multitud de  discípulos (Hechos 11:26). Por lo tanto, hasta los días de hambre, recibieron las bendiciones de Dios y pudieron enviar socorro a los hermanos de la Iglesia en Jerusalén (Hechos 11:28-30). También, Dios nos llamó a nosotros para el pacto de la evangelización mundial y el día de hoy, comienza sus obras.

¿Tenemos miedo a las heridas del pasado, a los problemas del hoy y a la ansiedad por el futuro? Si nos concentramos en el pacto, podemos confirmar las obras de Dios y podemos glorificar a Dios con el gozo de lo que nadie más puede hacer; la verdadera sanidad, la economía de la luz y la seguridad del futuro.

Dios, gracias por tu gracia y por darnos las bendiciones con las que podemos disfrutar de lo que nadie más puede hacer.

Mensaje Núcleo | 16.5.2020