LOS EVANGELISTAS DE LA IGLESIA PRIMITIVA QUE MOVIERON EL MUNDO ENTERO
Hechos 7:54-60 | Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió (V. 59-60).
Antes que nada, hay una cosa que tenemos que preparar con el pacto de la cumbre que Dios nos ha dado. Es tener el tiempo de la cumbre, la actitud de la cumbre y el recipiente de la cumbre. También, tenemos que recibir las respuestas para las Iglesias y las respuestas para ser la cumbre (el pre-campamento). En este momento, acontece realmente el campamento para sanar el espíritu, la vida y el cuerpo. Finalmente, todas las cosas se convierten en el pacto y en la visión por lo tanto, se cumple el sueño. Después, podemos hacer la obra maestra de restaurar la imagen de Dios (el post campamento). Los creyentes de la Iglesia Primitiva eran los protagonistas de este proceso. ¿Cómo estos creyentes podían cambiar el mundo?
1. Aceptaron todo
Roma obstaculizaba el Evangelio con las políticas y con las leyes (Hechos 7:54-60). Sin embargo, los creyentes de la Iglesia Primitiva no fueron atrapados por la oscuridad porque tenían la respuesta y el poder espiritual hasta que pudieron aceptar todo. Más allá de aceptar, pudieron vencer a la cultura (Hechos 8:4-8) y a la ideología (Hechos 8:26-40) que intentaban conquistar los israelitas.
2. Cedieron todo y dejaron todo
Ellos descubrieron lo que eran las cosas de Dios, por lo tanto podían ceder todo (Hechos 1:1-8, 14). En el Aposento Alto de Marcos, experimentaron las respuestas sorprendentes y experimentaron las obras de levantar al cojo (Hechos 3:1-12). Ya que tenían el único nombre que da la salvación (Hechos 4:12), ni siquiera la muerte podía vencerles (7:1-60). Más bien, ellos fueron al campo que nadie más podía ir (Hechos 8:4-8) y abrieron la puerta de las misiones mundiales (Hechos 11:19, 13:1-4). Aunque estaban en la situación en la que podían perder todo, se concentraron en el “Yo”, “lo que es mío” y “mi campo”.
Entre aquellos creyentes de la Iglesia Primitiva, Esteban tuvo una vida muy corta. Sin embargo, la historia que él hizo permanecerá para siempre ya que la Iglesia de Antioquía fue levantada y Pablo, quien era uno de aquellos que tomaban la iniciativa de matar a Esteban, renació como un evangelista. De esta manera, empezaron las misiones mundiales. Por lo tanto, Esteban fue un protagonista que se aferró al pacto.
Gracias porque podemos aceptar y ceder todo. Gracias por darnos la respuesta con la que estamos bien aunque perdamos todo lo demás. Guíanos para que podamos aferrarnos al pacto preciso. Oramos en el nombre de Jesucristo. Amén.
Mensaje Núcleo | 2.5.2020