LAS PERSONAS QUE RECIBIERON LA PALABRA
Éxodo 20:18-21 | Y Moisés respondió al pueblo: No temáis; porque para probaros vino Dios, y para que su temor esté delante de vosotros, para que no pequéis (V. 20).
Todos sabían que sería difícil caminar en el desierto por donde iba el pueblo de Israel. Además en el desierto habían crisis. Sin embargo, Dios les dio y cumplió su palabra en el monte Horeb y en el monte de Sinaí. Dios les encargó su futuro que fue entrar en la tierra de Canaán, a las personas que conocían la corriente y el cumplimiento de la palabra. ¿Qué tipo de la corriente de la palabra tenemos que conocer el día de hoy?
1. El mensaje dado a todas las personas
La palabra de Dios es como una brújula en el desierto, es decir, en la vida. Es porque el Evangelio es la palabra de Dios y es absolutamente necesario para todas las personas. Sin embargo, muchas personas, sobre todo las personas en los países que son superpotencias mundiales no conocen el valor del Evangelio y están separados de la palabra de Dios. Como resultado, ha llegado la época donde el Evangelio desaparece y hay una realidad de que muchas personas no tienen más remedio que vivir en las tinieblas.
2. La palabra dada solamente a los creyentes
En esta época, Dios nos llamó como sus hijos, quienes adoran sólo a Dios y se aferran al sólo el Evangelio. Si nos olvidamos de la razón por la que tenemos que aferrarnos al Evangelio, al final vamos a ser como esclavos de Satanás como aquellos no creyentes y estar destinados a la servidumbre. Por lo tanto, Dios nos indica la corriente de la palabra en la que podemos destruir el poder de Satanás y salvar la época, la época donde está desapareciendo el Evangelio.
Dios guía la vida de aquellos que siguen la corriente de la palabra para que estén aferrándose a la palabra tan precisa y proclamada en el púlpito. Esta palabra se convierte realmente en una respuesta y este es el poder de Dios que nos hace confirmar las respuestas. Nosotros, caminamos por el desierto en la realidad presente por eso, el día de hoy, necesitamos el poder de Dios. Hoy, veremos el poder de Dios que obra con nosotros y se restaurarán esta época y los espíritus que están preparados.
En esta vida que es el camino del desierto, guíanos para que no dependamos de la realidad o de las situaciones, sino que sigamos la corriente y el cumplimiento de la palabra. Oramos en el nombre de Jesucristo. Amén.
Segundo Culto de la Iglesia Emanuel | 29.3.2020