¡SALVEN AL MUNDO!

Hechos 1:1, 3, 8 | Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra (V.8)

El Evangelio es una ciencia espiritual. Cuando conozcamos de la verdad espiritual que está dentro del Evangelio podremos salvar al mundo. Es la primera y la última promesa de Dios (Hch.1:8). Dios me ha llamado como un Remanente que conoce  el mundo espiritual y me prometió la bendición de la re-creación mediante el poder de Dios quien transciende el tiempo y el espacio. Entonces, ¿qué tipo de la re-creación va a ocurrir?

1. La re-creación en los trabajos (en los estudios y en la ocupación) y en la Iglesia

Cuando haya venido sobre nosotros el Espíritu Santo, podremos cambiar nuestra naturaleza con la que salvaremos al mundo. Empezaran las obras de la re-creación en los trabajos con la gran fuerza espiritual que está dentro del Evangelio. Además, se manifiestan las obras de la re-creación con las cuales revivirán las Iglesias. Ya que el plan de Dios nunca cambia a pesar de que haya algunas circunstancias, solamente tenemos que creer y esperar.

2. La re-creación en el mundo.

Dentro del Evangelio hay un poder sorprendente que el mundo no conoce y que es invisible a los ojos físicos. Dentro de esto podemos ver los 62 puntos de la vida del evangelista que son completos en el pacto. Al conocer a Cristo, se establece el Reino de Dios y el Espíritu Santo obra. También vienen las respuestas de los 21 puntos de la esencia de la vida del Evangelista y se abren las puertas de la oración. Dios nos guía a descubrir el talento y a cambiar la corriente del mundo. Nuestros trabajos son utilizados para la evangelización del mundo y finalmente, podemos sanar el mundo en la posición de la cumbre que Dios levanta.

Dios preparó el camino de la re-creación en el campo de la familia, la Iglesia y las escuelas. En todo tiempo y en todos los lugares solamente tenemos que descubrir y gozar el pacto de Cristo, del Reino de Dios y del Espíritu Santo y disfrutar de que somos los testigos que Dios ha levantado.

Gracias por darnos el pacto con el que salvaremos al mundo, que seamos los testigos de la re-creación. Oramos en el nombre de Jesucristo. Amén.

3.er mensaje de la Conferencia de Remanentes en Norteamérica (RCA) / 30.11.2019