LO QUE TIENEN QUE HACER URGENTEMENTE LOS LÍDERES (EL ESTADO DE PÁNICO DE ESPIRITUAL)

2 Reyes 19:35 | Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos.

La mayoría de las personas luchan por las cosas que son visibles. Sin embargo, Satanás las lleva a la maldición y al desastre con aquellas cosas que son invisibles. Incluso las Iglesias que les tienen que dar la correcta respuesta están siendo engañadas por las cosas que son visibles y como resultado, perdieron otras muchas cosas. En este momento, yo quien he sido llamado como el líder que salvará el mundo, ¿qué tipo de la batalla tengo que luchar?

1. La batalla que transciende el tiempo y el espacio

Tenemos que luchar contra las fuerzas de la oscuridad que son invisibles. Esta batalla transciende el tiempo y el espacio. Es muy importante restaurar la sensibilidad de este tipo de la batalla espiritual. Dios ha llamado a sus hijos que tienen el Evangelio como los líderes en la batalla espiritual. Cuando restauramos el secreto de las 24 horas, podemos ver el nivel del Reino de Dios que transciende el tiempo y el espacio asimismo podemos confirmar el triunfo eterno.

2. La batalla de los discípulos, la última batalla

Queda una batalla importante a los que se aferran al pacto. Es una batalla de levantar tres tipos de discípulos. Es levantar los discípulos de las 24 horas que miran los hechos espirituales como los hechos verdaderos, científicos, bíblicos y Evangélicos igual que lo hicieron los 7 Remanentes. También es levantar los discípulos profesionales que dan la respuesta a su campo profesional con las 6 herramientas y por último, es levantar los discípulos que son modelos del Evangelismo. Después, tenemos que levantar los que quedan, que son los que luchan en la batalla con la oración durante las 24 horas, el Evangelismo y sus estudios.

Cuando creemos al 300% en la Palabra de Dios podemos ver que es una batalla que Dios ya venció. Veremos que tenemos el éxito que el mundo no puede dar y que estamos en la mano poderosa de Dios. En ese momento, podremos salvar a las 237 naciones con el poder que Dios nos da.

Que seamos los líderes que tienen los ojos espirituales abiertos. Abre nuestros ojos para que vean el mundo espiritual. Oramos en el nombre de Jesucristo. Amén.

1.er mensaje de la Conferencia de líderes de Norteamérica (RCA) / 27.11.2019