de Marzo. LA ENFERMEDAD QUE SE PUEDE SANAR SÓLO CON EL EVANGELIO
Marcos 5:1-8 | Y clamando a gran voz, dijo: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios
Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes. (V.7)
En la Iglesia hay algunos religiosos que asisten al culto forzadamente, creyentes que han recibido la salvación pero que solo vienen al culto, los fieles que aman la Palabra y los obreros que transmiten el Evangelio. El texto de hoy habla de como un hombre con un espíritu inmundo y con sufrimientos viene corriendo al Señor Jesús. Los médicos no pueden sanar las enfermedades espirituales. ¿Cómo podemos ayudar a aquellos que están afligidos por los problemas espirituales?
1. Confirmar la identidad de los hijos de Dios que conocen a Cristo
Dios nos ha llamado como sus hijos. Los hijos de Dios gozan su identidad obtenida mediante Cristo. También pueden destruir la trampa que armó Satanás. El Evangelio es Cristo que nos da la victoria completamente a pesar de ceder en todo. Somos los hijos de Dios, que transmiten en cualquier tiempo y lugar que Jesús es el Cristo.
2. Experimentar la autoridad y el poder conforme a la identidad de los hijos de Dios
Los hijos de Dios han recibido la autoridad para echar fuera demonios. En el nombre de Jesucristo podemos destruir el poder de la idolatría, ser libres de supersticiones y adivinaciones y también echar fuera los espíritus de maldad. Dios nos da la bendición espiritual y sabiduría para poder experimentar el poder de Dios Trino. (Hch1:8) No hay ningún problema por causa de mi impotencia. Puedo superar hasta los sufrimientos que vienen por la enfermedad y ninguna circunstancia puede ser un obstáculo. Cada persona con la que me encuentro, al escuchar el Evangelio, recibirá nuevas fuerzas y revivirá.
Sólo con el Evangelio se pueden sanar las enfermedades espirituales. Se puede experimentar el poder que viene de la identidad y la autoridad de ser hijos de Dios. Tenemos la convicción de que seremos los testigos que sanarán las enfermedades con la oración profunda, la meditación profunda de la Palabra y la respiración profunda.
¡Dios! guíame a ser el protagonista que soluciona con sólo el Evangelio los problemas espirituales que hay en mi familia, linaje y campo.
1er Culto de la Iglesia Emanuel/ 27.10.2019