EL COMIENZO DEL EVANGELISMO PARA EL APOSENTO ALTO
Hechos 1:14
Muchas iglesias en los Estados Unidos y Europa están cerrando sus puertas. El mundo se ha desarrollado, pero también ha enfermado espiritualmente y se ha debilitado. Necesitamos desesperadamente el movimiento del Evangelio que se levantó en la Iglesia Primitiva. ¿Por qué nos ha llamado Dios en este momento de crisis?
1. Continuemos la sanidad intensiva y los pre-campamentos (Hechos 1:14)
Si nos aferramos al pacto correcto y nos concentramos, recibiremos sanidad para todos nuestros problemas. Jesús solucionó todo en el monte Calvario (Juan 19:30), resucitó y compartió su última misión en el monte de los Olivos. Los discípulos experimentaron el cumplimiento de la Palabra en el aposento alto de Marcos. El comienzo del movimiento de evangelismo del aposento alto consiste en llegar a nuestra conclusión en las respuestas de “siempre Cristo”, el Reino de Dios y la llenura del Espíritu Santo y en disfrutar de nuestra misión.
2. Los discípulos se levantan cuando todas las personas se convierten en puertas del evangelismo
Dios abre las puertas del evangelismo. Los Remanentes que han experimentado la llenura del Espíritu Santo se darán cuenta de que todas las personas son puertas. El día de Pentecostés se abrieron las puertas por medio de los discípulos que se habían reunido en el aposento alto de Marcos y de los empresarios que eran líderes de iglesia de quince naciones. Ese día, en ese lugar y en ese momento, se abrieron puertas todavía más grandes del movimiento de evangelismo por toda la región por medio de los tres mil discípulos que escucharon las palabras del apóstol Pedro y que fueron bautizados.
La primera misión que Dios nos dio fue experimentar “solo, unicidad y re-creación” a través de Cristo. Las últimas misiones fueron restaurar la iglesia, ayudar a los pastores y salvar a las futuras generaciones. Nuestra misión eterna es disfrutar de la bendición completa de nuestro estado y autoridad eterna cuando damos culto a Dios.
Oración del pacto. Querido Dios, restaura en nosotros la gracia de disfrutar de la primera y última misiones, así como de la misión eterna en el campo.