LA MISIÓN QUE DEBEMOS EMPRENDER PRIMERO
Mateo 25:1-12
Ninguna iglesia ha soportado tantas dificultades como la Iglesia Primitiva. Sin embargo, ninguna de ellas movió a sus miembros porque habían confirmado varios misterios. Se aferraron al misterio de Cristo como su respuesta y disfrutaron de la obra del Reino de Dios que recibieron como su misión. También sabían que la época de las fuerzas de la oscuridad se acabaría y poseían el misterio para salvarla. Estos son algunos puntos que debemos recordar.
1. Culto y oración
El poder de la Palabra se hace evidente cuando damos culto y oramos aferrándonos al pacto. Cuando nos aferramos al pacto de Cristo y esperamos, se levanta el poder del Evangelio. Este es el motivo por el cual la Iglesia Primitiva superó fácilmente a la organización judía. Experimentaremos las mismas obras del Espíritu Santo como personas que nos hemos aferrado a este pacto. Esa es la razón por la cual la oración que se aferra al culto y al pacto es muy importante.
2. Una oración por el evangelismo y las misiones
Las obras importantes se levantan porque Dios da respuestas tremendas cuando oramos por el evangelismo y las misiones que se aferran a este pacto. Aun cuando no seamos conscientes de ello, el Espíritu Santo abrirá las puertas (Hechos 2:9-11). Las puertas de la sanidad (Hechos 8:4-8) y los encuentros importantes (Hechos 8:26-40) comenzarán. Los ángeles celestiales de Dios se movilizarán con toda seguridad en el campo donde se cumplirá ese pacto. También se abrirán las puertas a Antioquía que salvarán al mundo y el camino a la evangelización de Roma que demolerá al enemigo.
3. Cuando nos enfrentamos a una crisis
Los siete Remanentes de la Biblia y las figuras de la Iglesia Primitiva y Hebreos 11 también se enfrentaron a crisis. Todas estas personas se aferraron al pacto, oraron y dieron culto. Por eso, el hecho de enfrentarse a una crisis en medio de ser usados para el evangelismo y las misiones se convirtió en la mejor respuesta para ellos. Dios envió a un ángel que ayudó a Daniel y sus tres amigos. También movilizó un ángel que hirió al rey Herodes, quien había encerrado a Pedro. Cuando Pablo se enfrentó a una crisis, un ángel del Señor compartió el pacto. Estas obras siguen levantándose ahora. Lo más importante es que Dios nos hace orar en medio de nuestras crisis para que podamos ser llenos del Espíritu Santo y entrar en las obras que nadie puede bloquear.
Oración del evangelista. Querido Dios, abre nuestros ojos espirituales, danos conocimiento espiritual, y ayúdanos a aferrarnos al pacto de Tu Palabra para salvar a las iglesias del mundo.