LA FUERZA QUE DIOS NOS DA – CUMBRE ESPIRITUAL
Hechos 1:8
Antes de que Jesús subiera al cielo después de resucitar, prometió la llenura del Espíritu Santo (Hechos 1:8), que es el nuevo poder que necesitamos. No podemos obtener este poder a través de nuestros propios métodos. Por eso, Dios prometió dárnoslo. Si poseemos este poder y disfrutamos de él, nada será un problema para nosotros. ¿Qué bendiciones ha preparado Dios para que podamos levantarnos como la Cumbre Espiritual que posee este poder?
1. La cumbre de la Palabra
La cumbre de la Palabra salvará la nación y la época. Debemos conocer y tener el Evangelio correcto del que habla la Biblia para que esto suceda. La obra del éxodo de Egipto comenzó cuando este Evangelio fue compartido. Existe una corriente del Evangelio. Dios levantará a la persona que se aferra y ve la corriente del Evangelio como la cumbre de la Palabra que da respuestas a los individuos, la época y el mundo.
2. La cumbre de Oración
La cumbre de Oración salvará el mundo. Dios sabe que no tenemos fuerzas para salvar el mundo; por eso, ha prometido estar siempre con nosotros. Por tanto, en lugar de títulos de oración motivados por nuestro “yo”, debemos encontrar los títulos de oración que Dios desea. En otras palabras, debemos concentrarnos en Dios, que está con nosotros en este momento, y disfrutar de Emanuel. Cuando nos concentramos en Dios, Su deseo y Sus títulos de oración, Él nos levanta como Remanentes que salvan el mundo.
3. La cumbre de Evangelismo
Si tenemos la respuesta, podemos transmitirla a cualquier campo. Esto es evangelismo. Si descubrimos la respuesta perfecta de Dios, podremos transmitirla a las personas que están muriendo y que no pueden encontrarla. Las personas se avivarán a través de su trabajo (estudios y ocupación). El movimiento de la Palabra comenzará en el campo a través de la persona que recibió esa respuesta. Dios nos ha llamado para salvar nuestro campo y nuestro trabajo. Por eso, necesitamos la fuerza espiritual que sólo Dios da.
Oración del evangelista. Querido Dios, levántanos como la cumbre de la Palabra, de la Oración y del Evangelismo que salva la época, nuestro trabajo y el campo con la fuerza que solo Tú puedes dar.