EL MINISTERIO QUE DEBEMOS EMPEZAR AHORA
Mateo 17:1-9
Israel fue un pueblo que Dios escogió, pero que perdió la esencia espiritual y experimentó siete desastres. En esta era está sucediendo lo mismo. Satanás está penetrando en el interior de las personas mediante las estrategias de las tres organizaciones (masones, Nueva Era, judíos) y se está adueñando no solo de sus cuerpos físicos, sino también de sus almas. Como consecuencia, en el futuro vendrán nuevos desastres. En esta situación hay algo que debemos comenzar obligatoriamente por el bien de nuestro estado espiritual. ¿De qué se trata?
1. Qué poseer (sistema), qué disfrutar (Evangelio), de qué dar testimonio (mirada)
Primero, debemos prepararnos con el sistema espiritual de disfrutar de aquello que Dios nos ha dado a través de la oración. Es más, debemos preparar un sistema para recibir respuestas en nuestra vida cotidiana y un sistema para disfrutar de salud física. La obra de Dios comenzará si cambiamos nuestras grabaciones, raíces y naturaleza de esta forma con el Evangelio. Para convertirnos en testigos de esta obra, debemos fijar nuestra mirada en lo que hay en un segundo plano que no podemos ver, en las respuestas que están ocultas en el interior y en la corriente espiritual.
2. Egipto (Deuteronomio 6:4-9), Babilonia (Hageo 2:1-9), era de Roma (Hechos 2:1-4)
La Biblia nos habla de las personas que prepararon el sistema espiritual que Dios deseaba y que salvaron la era en cada crisis. Dios levantó la obra de abrir el Jordán, derrumbar las murallas de Jericó y conquistar Canaán a través de Josué, que conocía el misterio del pacto de la sangre de la era de Egipto, las tres fiestas anuales en el desierto y el Arca del Pacto. En la era de Babilonia, Dios salvó a Israel a través de Daniel y sus tres amigos, de Ester y de unos diez profetas que tenían este misterio. Las personas creyentes de la Iglesia Primitiva también fueron testigos que disfrutaron del sistema espiritual durante la era de Roma. Dios levantó la obra del Espíritu Santo que había prometido para evangelizar Roma.
3. Principio
Hay una manera de restaurar más rápidamente el sistema espiritual. Consiste en mirar a Cristo nuestro Señor y buscar las cosas que están arriba, como hicieron las personas de fe de las que nos habla Hebreos (Hebreos 12:1-2, Salmos 81:1-12, Colosenses 3:1-3). A partir de ese momento, la sanidad se revelará por medio de la obra del Espíritu Santo que Dios ha prometido (Joel 2:28, Zacarías 4:6, Hechos 2:17-18). Solo necesitamos disfrutar del sistema de la oración a tiempo marcado, de la oración continua de 24 horas y de la oración concentrada todos los días. La obra de Dios se levantará con toda seguridad si preparamos nuestro estado espiritual para disfrutar de la obra del Espíritu Santo que sanará los problemas espirituales y el mundo interior.
Temas para el fórum. ¡Dios! Permítannos entrar en el sistema espiritual para disfrutar de la obra del Espíritu Santo que puede sanar los problemas espirituales y el mundo interior.