ANTES DE LA DEVOCIÓN, EL TIEMPO DE DEVOCIÓN, DESPUÉS DE LA DEVOCIÓN
Hechos 19:8-20
Satanás sigue usando elementos visibles a nuestros ojos para atraparnos, como lo que comemos (fruto del conocimiento), la economía (Nefilim) y el éxito (Torre de Babel). Después nos encierra en una cultura que parece buena pero que en realidad está dominada por malos espíritus. Así caemos en su trampa que nos conduce a una destrucción inevitable. Dios envió a Cristo para salvar a la humanidad que había caído en esta destrucción. Como personas que hemos recibido la bendición de la salvación debemos dedicarnos a las misiones y al evangelismo. ¿Qué debemos hacer antes de devocionar, qué obras se levantan durante el tiempo de devoción, y qué respuesta recibimos después?
1. Lo que debemos hacer antes de devocionar
Dios desea que recibamos fuerza antes de ofrecer nuestra devoción. Esta fuerza es la obra del Espíritu Santo en Hechos 2:1-13. Los miembros de la Iglesia Primitiva que disfrutaron de esta bendición experimentaron las obras de Hechos 2 en cada campo en el que entraron. Cuando se llenaron del Espíritu Santo y de conocimiento, entendieron mejor la Palabra de Dios y el número de discípulos se multiplicó (Hechos 6:1-7). Los campos de Hechos 13, 16 y 19 sanaron a través de los evangelistas que disfrutaron de esta fuerza. Dios también obrará en nuestras vidas si nos aferramos al poder del Espíritu Santo.
2. Obras que se levantan durante el tiempo de devoción
Pablo se aferró a esta fuerza y visitó las sinagogas durante tres meses para proclamar con valentía el reino de Dios. Después levantó individualmente a sus discípulos en la escuela de Tirano durante dos meses y meditó todos los días. De esta forma, todo el mundo en Asia, tanto judíos como griegos, escucharon la Palabra de Dios. Este tipo de obras se levantará cuando nos entreguemos al evangelismo y a las misiones (Hechos 19:8-20) si disfrutamos de Cristo, del reino de Dios y de la llenura del Espíritu Santo a través de la fuerza que Dios no da.
3. Respuestas que se reciben después de la devoción
Lo más importante es lo que viene después de la devoción. Después de que Pablo demostrase su devoción, Dios abrió sus ojos para ver el futuro. Desde ese momento, nadie pudo interferir con la devoción de Pablo mientras él se aferró al pacto de la evangelización de Roma (Hechos 19:21, 23:11). Pablo recibió respuestas en medio de la crisis que representó la tormenta (Hechos 27:14). Este es el modelo de devoción que hoy debemos desarrollar en nuestros campos. Experimentaremos la respuesta de que el reino de Dios se establezca cuando nos aferremos al pacto del futuro que Dios nos ha revelado y decidamos devocionar.
Temas para el fórum. ¡Dios! Permite que devocionemos para cumplir el pacto mientras nos aferramos a la fuerza espiritual que nos has dado. Haz que las obras de salvar el mundo se levanten a través de nuestra pequeña devoción.