EL EXAMEN DE NUESRTA VIDA PARA LA CUMBRE

Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Filipenses 4:12-13

Sucede muchas veces que mientras vivimos en este mundo, perdemos las respuestas que Dios nos ha dado, ya que somos movidos y caemos fácilmente en los problemas y conflictos. Sin embargo, Pablo se contentaba en cualquier situación (Filipenses 4:12) y confesó que era capaz de hacer todas las cosas por medio de aquel, quien le daba fuerza (Filipenses 4:13). Con esto, él convertía todos sus problemas en puntos de cambio y vivía una vida disfrutando de respuestas grandiosas. ¿Cómo podemos vivir una vida disfrutando grandes respuestas a través de los problemas al igual que Pablo?

1. La oportunidad de la cumbre

Dios nos ha preparado, los que son hijos de Dios tienen una ciudadanía celestial, todas las bendiciones y las respuestas de la cumbre para salvar al mundo (Filipenses 3:20). La mayoría de la gente pierde las oportunidades que Dios le presenta a lo largo de su vida. La manera para restaurar esto es por medio de la llenura del Espíritu Santo. Cuando buscamos la llenura del Espíritu Santo, las cosas incorrectas que han sido grabadas, que han sido impresas en nosotros, empiezan a ser sanadas y gozaremos las bendiciones de Dios que vienen de lo alto y que se nos han sido dadas por gracia. (Colosenses 3:1-4) Este es el principio para la cumbre.

2. La experiencia de la cumbre

Jesucristo, quien resolvió todos nuestros problemas muriendo en la cruz en el Monte Calvario y resucitó de entre los muertos, prometió que seríamos sus testigos hasta lo último de la tierra, cuando el reino de Dios (Hechos 1:3) viniera sobre nosotros por medio del nombre de Cristo (Hechos 1:1); además que seríamos llenos de su Espíritu Santo (Hechos 1:8). Cuando se aferraron a la promesa y oraron verdaderamente, (Hechos 1:14) los miembros de la Iglesia Primitiva experimentaron la bendición de ir hasta lo último de tierra; Israel, Asia, Macedonia y Roma; salvando el campo y testificando el Evangelio. Nosotros también como hijos de Dios que están viviendo en estos tiempos, podemos experimentar la cumbre de salvar al mundo, si oramos y nos aferramos a la promesa a la que se aferró la Iglesia Primitiva.

3. La dirección de la cumbre

Siendo nosotros aquellos que han experimentado el poder del Evangelio, nuestra lucha no es contra sangre ni carne. Peleamos la batalla espiritual contra el poder de Satanás. Nuestro poder no tiene nada que ver con ganar la batalla. Debemos solamente buscar la llenura del Espíritu Santo. Así, podremos tener la victoria en la batalla espiritual y estar en el frente como la cumbre espiritual para salvar a los líderes y todo el campo que Dios nos ha confiado. Cuando las cumbres de cada especialidad disfrutan de unanimidad, el milagro de la salvación del mundo ocurre.

FORUM. ¿Cuál es mi área de especialización? ¿Por qué debo de levantarme como la cumbre? Escribe lo que viene a tu mente, mientras meditas y reflexionas en la Palabra de Dios ahora mismo.