MINISTERIO DE TÍQUICO
Colosenses 4:7-8 Todo lo que a mí se refiere, os lo hará saber Tíquico, amado hermano y fiel ministro y consiervo en el Señor, el cual he enviado a vosotros para esto mismo, para que conozca lo que a vosotros se refiere, y conforte vuestros corazones, Tíquico, compañero obrero de Pablo, estuvo a su lado durante cada dificultad mientras Pablo predicaba el Evangelio. En cada campo, con cada persona, y en cada horario, vio con precisión y tomó decisiones respecto a la obra de Dios con los ojos del Evangelio. También cumplió la obra importante de compartir la situación del campo con otras personas evangelistas. Para vivir como el evangelista bendecido Tíquico, ¿de qué verdades debemos ser conscientes?
1. Necesitamos compartir las circunstancias del campo
Tíquico nos proporciona un informe preciso de las circunstancias personales de Pablo y también de la situación del campo. Oró la oración de conectar el ministerio del siervo del Señor y de la persona discípula, y fue alguien que animó el corazón de las personas evangelistas. No importa lo conocida que sea una persona: si no conoce el plan de Dios que está oculto en el campo, no podrá tener los ojos para ver el campo. Sólo cuando vemos correctamente los problemas del campo podemos orar con la oración de conectar con otras personas en nuestro ministerio.
2. Debemos ver las obras de Dios y las verdades espirituales
La mayoría de personas no pueden ver correctamente las verdades espirituales y son perseguidas por el mundo o viven empapadas por la cultura del mundo. Como no conocen las verdades espirituales, no pueden superar al mundo. Satanás nos hace fracasar en el campo y nos impide recibir gracia. Por este motivo, no podemos caer en el engaño cuando miramos al campo; tampoco podemos dejarnos engañar por la estrategia de Satanás. Las fuerzas de oscuridad se hundirán si podemos ver de verdad el plan que Dios ha preparado y los problemas espirituales en el campo.
3. Debemos gozar del poder del Espíritu Santo cuando pensemos en los frutos importantes
Incluso si los hijos y las hijas de Dios cometen errores debido a sus debilidades y pierden las verdades espirituales, su estatus de hijos de Dios no cambia. Sin embargo, como la Palabra de Dios es viva y eficaz, grandes bendiciones nos esperan si recibimos correctamente respuestas. Cuando los hijos de Dios oran, los frutos ocultos en el campo se revelan y allá donde van los hijos de Dios, las fuerzas de oscuridad se quiebran. Para quebrar las fuerzas de oscuridad que han conquistado el campo, no debemos olvidar que somos hijos e hijas de Dios y disfrutar del poder del Espíritu Santo. Temas para el fórum. Mucha gente transmite su incredulidad y preocupaciones. A partir de ahora, compartamos el mensaje de ánimo como hizo Tíquico y convirtámonos en personas que miran al campo con un corazón de amor.