EL EVANGELIO QUE NADIE PUEDE BLOQUEAR
Hechos 28:23-31 Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento. (30-31) Somos hijos e hijas de Dios que han recibido la salvación al creer en Jesucristo. Somos también evangelistas que han recibido la misión de la evangelización mundial y que desean vivir como evangelistas. Sin embargo, estamos muy lejos de ser testigos de Cristo, y hemos caído en desesperación. Pero las personas que formaban la Iglesia Primitiva no se desanimaron por su debilidad o su pobreza, sino que se mostraron firmes incluso ante la muerte y las persecuciones. ¿Qué misterio poseían que les permitió actuar de esa manera?
1. Misterio de Jesucristo
Cuando Pedro confesó que Jesús era el Cristo, Jesús prometió a Pedro las mayores bendiciones que el mundo no puede ni imaginar. Cristo no es algo que se pueda expresar por medio de palabras. Es de hecho un misterio que sólo se puede entender por la gracia de Dios. Las personas que formaban la Iglesia Primitiva habían pensado que Cristo era uno más de los profetas, pero después de encontrarse con Jesús resucitado, entendieron que Él era el único nombre que podía solucionar todos los problemas espirituales del mundo. Por este motivo, no dudaron ante ninguna circunstancia, problema o dificultad.
2. El Reino de Dios
Jesucristo resucitado explicó el reino de Dios durante cuarenta día. El cielo es el reino de Dios, pero podemos gozar de él también en la tierra. Allá donde va una hija o un hijo de Dios, los ejércitos celestiales se movilizan y las fuerzas de oscuridad son expulsadas. Satanás conquista el mundo a través de la idolatría e imponiendo una cultura dirigida por malos espíritus. Si oramos para que el reino de Dios se establezca en los campos donde vivimos, descubriremos a los discípulos ocultos en el campo y la cultura de idolatría largamente enraizada caerá.
3. Llenura del Espíritu Santo
Jesús resucitado prometió que seríamos testigos hasta lo último de la tierra sólo cuando el Espíritu Santo viniera sobre nuestras vidas. La Iglesia Primitiva cogió esta promesa, y como resultado, se mantuvo firme en medio de todo tipo de dificultades, problemas y persecuciones. Sus miembros sabían que no hay otra respuesta que la llenura del Espíritu Santo porque todos los campos necesitan a Jesucristo. Por eso nadie puede bloquear el Evangelio, y en última instancia, pudieron conquistar Roma.
Temas para el fórum. Somos hijos e hijas de Dios. ¿Pero cuáles son nuestros problemas y nuestros miedos? Disfrutemos de un día en el que descubramos el reino de Dios, a Jesucristo y la llenura del Espíritu Santo y hagámoslo algo propio.