SANIDAD DEL EVANGELIO
Mateo 8:1-17 Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera los demonios, y sanó a todos los enfermos; para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias. (16-17) Vemos y escuchamos tantas noticias en los periódicos y en la televisión que nos llenan de perplejidad. Las enfermedades crecen a pesar de que se producen avances médicos todos los días, y no paran de incrementarse los crímenes y las enfermedades mentales aunque cada vez contamos con más recursos. Los problemas para los que no tenemos explicación crecen y crecen; por eso, debemos saber que la fuente de todos los problemas es espiritual y debemos centrarnos en la sanidad espiritual. Debemos entender que la solución a todos los problemas reside sólo en el Evangelio y debemos centrarnos en la sanidad espiritual. Debemos comprender que la solución a todos los problemas sólo la podemos encontrar dentro del Evangelio y debemos asumir la misión de sanar al mundo. ¿Cómo podemos empezar la sanidad del Evangelio?
1. Misión de la sanidad
El mundo cuenta con muchas respuestas como la ciencia, la medicina o la filosofía. Sin embargo, ninguna puede convertirse en la respuesta del problema fundamental de la humanidad, que es el problema espiritual. Sólo el Evangelio de Jesucristo puede solucionar los problemas espirituales y salvar a la humanidad del pecado y las maldiciones que son resultado de habernos alejado de Dios. Nosotros y nosotras, que tenemos este Evangelio, debemos entender la necesidad que existe de Evangelio y asumir la misión de sanidad del mundo. La razón por la que Dios nos ha escogido y salvado es para sanar al mundo que necesita sanidad con el Evangelio.
2. Sanidad en la Biblia
Aunque débil y pequeña, la Iglesia Primitiva que predicó el Evangelio al mundo entero conocía la importancia de la sanidad espiritual. Jesús vino a la tierra y sanó en primer lugar a las personas enfermas y poseídas por demonios. También habló de la sanidad después de Su resurrección. Debemos entender que Dios ha dado a Sus hijos e hijas la autoridad para expulsar demonios (Marcos 3:15) y para experimentar una sanidad correcta cuando testifican Su poder por medio del Evangelio y cuando la Palabra es proclamada.
3. Cosas que debemos preparar para recibir sanidad
Muchas organizaciones del mundo están levantando movimientos de sanidad como el movimiento chi (energía) y de meditación. Pueden parecernos efectivos en un primer momento, pero ninguna otra cosa que no sea Evangelio puede salvar a la humanidad o sanar correctamente a las personas. Debemos desempeñar un ministerio de sanidad correcto siendo conscientes que el Evangelio de Jesucristo es la única respuesta. Debemos levantar obreros y obreras que puedan dar respuestas con el Evangelio y comenzar el movimiento de la Palabra en los campos que necesitan sanidad. Este es el comienzo de la sanidad del Evangelio.
Temas para el fórum. Dios nos ha llamado como evangelistas con Evangelio que sanarán el mundo que cada vez es más malvado. Meditemos profundamente en nuestra misión para sanar los problemas espirituales con la Palabra y para salvar al mundo con el Evangelio.