TRES BATALLAS
Efesios 6:10-24 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.(12) Hay muchas cosas deseables en el mundo. Sin embargo, en medio de las cosas que queremos, debemos analizar cuidadosamente si existen “enemigos ocultos”. Hay batallas que se levantan a nuestro alrededor que podemos ver, pero la época en la que vivimos es una época de batalla espiritual. Nuestros enemigos se han ocultado, se han enfundado una apariencia atractiva, y nos roban nuestros corazones y mentes. Abramos nuestros ojos espirituales y peleemos estas tres batallas.
1. Batalla espiritual
El mundo es una batalla contra los malos espíritus. Los malos espíritus han tomado el control de la políticas, la economía y la cultura, e impiden que el Evangelio entre en estos campos. Sin embargo, Dios ya han ganado esta batalla. Cuando nos llenamos del Espíritu Santo, las fuerzas de oscuridad se destruyen. Al igual que un ejército está en alerta constante 24 horas al día durante una guerra, nosotros y nosotras debemos concentrarnos en la Palabra y disfrutar de que Dios está a nuestro lado mediante la oración de 24 horas. De esa manera, sin lugar a dudas, rebosaremos paz y acción de gracias y experimentaremos el poder de Dios.
2. Batalla en red
Las personas que formaban la Iglesia Primitiva oraron solamente por Jesucristo, el reino de Dios y la llenura del Espíritu Santo. Confirmaron respuestas únicas a través de ello y así comenzó el movimiento de evangelismo en varias regiones, con lo que pudieron salvar la vida de otras personas. El poder para salvar a la gente, al sistema y al futuro se obtiene por tanto de un modo natural. El hacer red por el movimiento de evangelismo comienza cuando recibimos todas las respuestas de que Dios está con nosotros y nosotras.
3. Batalla cultural
Una cultura separada de Dios no es buena. Puede parecernos aceptable porque nuestros ojos se han acostumbrado a ella. El camino para vencer a la cultura de oscuridad es gozar de nuestra identidad y autoridad en Cristo. A través de nuestros talentos y habilidades que Dios nos ha dado, debemos conquistar la cultura espiritual transformando la cultura de oscuridad en una de luz con la esencia del Evangelio.
Temas para el fórum. ¿Por qué nos sentimos mal hoy? Estamos en una época de batalla espiritual. Meditemos sobre lo que debemos orar como un soldado espiritual.