OYENDO, NO OYEN
Mateo 13:10-17
Dios nos ha dado el misterio más importante de su Reino. El respaldo de Dios Trino se establecerá dondequiera que vayamos nosotros, que poseemos este misterio. Dios permite que su Reino se establezca en todos los campos en los que entramos. También nos ha dado la mayor autoridad para atar el reino de Satanás en el campo donde vivimos. Si esto es así, ¿a qué pacto debemos aferrarnos y por qué debemos orar?
1. Lo desconocido – Ídolos (Satanás y dar culto a demonios)
Los egipcios construyeron pirámides y le dieron culto como ídolos porque no eran conscientes de los problemas espirituales que nacen de la idolatría. Por el contrario, José y Moisés vieron los problemas espirituales que estaban surgiendo de Egipto. Por eso, Dios les abrió las puertas de la victoria. Parecía que David estaba luchando contra los filisteos, pero en realidad estaba luchando contra los problemas espirituales que se originaron en el templo de Dagón. Dios abre las puertas de la victoria a las personas que conocen estas verdades y asumen el desafío.
2. Liberación
La mayoría de las personas, incluida su descendencia, viven como esclavos y cautivos de Satanás y están colonizados por él. Sus problemas espirituales continúan creciendo porque no son conscientes de los problemas espirituales que surgen de su estado actual. Satanás continúa arrastrando a las personas hacia la cultura de la oscuridad. Nosotros conocemos el misterio del Reino de Dios; por eso, debemos comenzar la guerra de los masones que liberará a esas personas.
3. Atacando a las 237 naciones del mundo
Satanás ataca a las 237 naciones del mundo y al mismo tiempo, esclaviza, aprisiona y coloniza a las personas. Por eso, las 237 naciones del mundo han caído en los doce problemas de Satanás (Génesis 3, 6 y 11; Hechos 13, 16 y 19; y los 6 estados de la persona no creyente). Debemos prepararnos para la Guerra del Masón para salvar a las 237 naciones del mundo y a la siguiente generación que han caído dentro de estos doce problemas. Con el fin de prepararnos para esa obra, Dios nos ha dado la bendición de “solo” (con) y el misterio de la “unicidad” que disfruta de Emanuel (Emanuel). Por último, Dios cumplirá la respuesta (Unanimidad) en la que todas las cosas se hacen uno para hacer el bien.
Oración del evangelista. Querido Dios, ayúdanos a disfrutar de la verdadera felicidad y el verdadero poder que se encuentra en la bendición de que estés con nosotros en nuestro campo y también en nuestras dificultades.