EL PLAN DE DIOS QUE PUEDE PARECER UN FRACASO
Daniel 1:8-9
Dios dio el Evangelio a Israel para hacer la evangelización mundial. Sin embargo, Israel fue incapaz de entenderlo. Babilonia invadió Israel, quemó los templos y destruyó la nación. Y a continuación, sometió a los israelitas a cautiverio. En estas circunstancias, Daniel y sus tres amigos tomaron una determinación. ¿Qué decidieron Daniel y sus tres amigos?
1. Un testigo en el campo
Decidieron convertirse en testigos en el campo. Dijeron que no beberían el vino ni comerían la comida que les daba el rey, lo que significaba que no comerían la comida que se ofrecía a los ídolos. Daniel y sus tres amigos fueron sometidos a cautiverio porque Israel se hundió por no tener el Evangelio. Por eso tomaron esa determinación. Las personas cristianas de la actualidad se aferran a ideologías equivocadas. Por eso, las iglesias de todo el mundo están cerrando sus puertas. Como personas de Dios, debemos aferrarnos al Evangelio y levantarnos como los testigos que salvan el campo.
2. Un testigo espiritual
Tomaron la determinación de convertirse en testigos espirituales. El rey Nabucodonosor fabricó una estatua grande y les dijo que se postraran ante él. Al son de la música, todos debían postrarse, pero los tres jóvenes no obedecieron las órdenes del rey. A pesar de las amenazas del rey, los tres jóvenes se negaron a postrarse y proclamaron que Dios los libraría si eran arrojados al horno de fuego. Incluso aunque Dios no los salvara, jamás se postrarían ante un ídolo de oro. Tan grande fue su fe, que Dios los protegió del horno de fuego enviando un ángel. Nadie puede vencer a un hijo espiritual de Dios.
3. Un testigo de la época
Dios llamó a Daniel para ser un testigo en su época. Cuando Daniel fue nombrado primer ministro, personas que calumniaban y difamaban pusieron en marcha una ley para ejecutar a cualquiera que adorara a dioses que no fueran el rey. Daniel sabía que este edicto real estaba sellado con el anillo del rey. Pero a pesar de eso, se arrodillaba cada día tal como lo había hecho antes y daba gracias. Como castigo, Daniel fue echado a un foso con leones, pero Dios envió a un ángel para cerrar las bocas de los leones, y Daniel sobrevivió sin recibir ninguna lesión. El rey echó a la gente que conspiró contra Daniel al foso de los leones y redactó una ordenanza sobre lo ocurrido para que todo el mundo lo supiera.
Oración del evangelista. Querido Dios, gracias por llamarnos como testigos en el campo, testigos espirituales y testigos de esta época. Permite que nos aferremos a este pacto y nos levantemos como testigos para salvar a todas las personas.