EVANGELISMO A TRAVÉS DE LA CONSEJERÍA
Hechos 3:8
Los adolescentes han caído en adicciones. Los problemas espirituales son fáciles de tratar si se cogen a tiempo, pero si se ignoran, se convierten en problemas más serios. Cada vez más personas se abandonan y se rinden ante el reto de vivir. Los equipos de la consejería de sanidad deben tratar en serio a estas personas y sanarlas. ¿Qué debemos tener en cuenta al hacerlo?
1. Sanidad fundamental
Debemos sanar los fundamentos de las personas para resolver los tres problemas. Necesitamos liberarlas de Satanás, los desastres y el trasfondo del infierno que la ciencia no puede ni revelar, ni resolver ni probar. Necesitamos a Jesús, quien vino como el Cristo y ha resuelto todos estos problemas. El discípulo Pedro confesó que Jesús era el Cristo (Mateo 16:13-20); desde ese momento, Dios obró poderosamente sobre él incluso cuando cometió errores o se mostró débil. En Samaria, las obras de esta sanidad fundamental se levantaron a través de Cristo (Hechos 8:4-8).
2. Sanidad personal
Pedro compartió el Evangelio que tenía con el hombre cojo que estaba sentado junto a la puerta del templo (Hechos 3:6). El hombre cojo se levantó inmediatamente al escuchar el nombre de Cristo y entró en el templo, caminando, saltando y alabando a Dios, y todas las personas lo vieron. Satanás tiembla de miedo ante el nombre de Jesucristo. No hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres por Dios, en que podamos ser salvos (Hechos 4:12). La consejería constituye nuestra principal oportunidad para sanarnos a través del Evangelio. La sanidad espiritual soluciona los problemas que están ocultos en primer lugar y después recibimos sanidad física. No debemos desanimarnos porque la persona a la que estemos aconsejando no esté completamente sanada. Dios ha preparado y cumplirá Su plan perfecto.
3. La sanidad de la época
Toda la época recibirá sanidad por medio de la consejería. Pedro, al conseguir que se levantara el hombre cojo que estaba sentado junto a la puerta del templo, sanó al pueblo judío (Hechos 3:1-12). Más tarde, Felipe sanó a Samaria, un lugar que sufría graves problemas (Hechos 8:4-8). África recibió sanidad gracias a que Felipe compartió el Evangelio con el eunuco etíope (Hechos 8:26-40). Pablo fue comisionado como un misionero que trajo sanidad espiritual a los campos del chamanismo (Hechos 13:1-12), la adivinación (Hechos 16:16-18) y la idolatría (Hechos 19:8-20). Después se fue a Asia, Macedonia y Roma, y la época comenzó a recibir sanidad.
Oración del evangelista. Querido Dios, permite que reciban sanidad los y las adolescentes que sufren de adicciones y problemas espirituales y aquellas personas que han renunciado a la vida. Por favor, danos las respuestas de la sanidad fundamental, la sanidad personal y la sanidad de la época.