LA ÉPOCA Y MISIONES CAMBIANTES
Colosenses 4:7-8
Las figuras bíblicas que movieron el mundo por medio de los medios de comunicación poseían el poder de ir más allá de todas las dimensiones. Moisés nos dejó el Pentateuco, Samuel escribió los libros de 1 y 2 Samuel y David hizo lo mismo con setenta y tres poemas mientras pastoreaba para que otras personas pudieran leerlos. El libro de Isaías contiene las obras más importantes que se levantaron en el Antiguo Testamento. Las epístolas de Pablo no solo difundieron el Evangelio, sino que también poseen un gran poder como medio de comunicación. La Reforma de Martín Lutero desempeñó un papel esencial como medio de comunicación. Los medios de comunicación son una gran herramienta en esta época en constante cambio. ¿Qué misión deben asumir las personas en los medios de comunicación?
1. Una época en constante cambio
Vivimos en una época de rápidos cambios. Los problemas espirituales están empeorando a pesar de que la industria sigue desarrollándose y estamos inmersos en la Cuarta Revolución Industrial. Puede parecer que estamos en medio de una crisis, pero debemos ver estas circunstancias como una oportunidad porque los hijos y las hijas de Dios poseemos un poder inmutable. Armados con este poder, sólo tenemos que compartir la respuesta a la crisis de esta época siempre cambiante.
2. El “yo”y nuestra misión
Como hijos de Dios, debemos liberarnos de nuestro nivel, base y estándar, y fijarnos en el nivel, base y estándar de Dios para cumplir con Su misión. El Éxodo era algo imposible para los israelitas, pero a los ojos de Dios, era justo y urgente. Por eso, Dios ordenó a Moisés que sacara a Su pueblo de Egipto. Si poseemos el nivel, la base y el estándar de Dios, las personas serán avivadas dondequiera que vayamos.
3. El “yo” y nuestro método
El contenido es la parte más importante de los medios de comunicación. Por eso, debemos recordar que nuestro método debe ser “sólo, unicidad y recreación”. Debemos confesar todas las mañanas: “Dios, solo Tú puedes ser glorificado hoy”. Podremos disfrutar del poder que Dios nos da si oramos para poseer los ojos del Evangelio con el fin de descubrir “sólo, unicidad y recreación”.
Oración del evangelista. Querido Dios, danos por favor el poder que supera todas las dimensiones. Como David, ayúdanos a cultivar el poder que nos has dado en nuestro campo.