LA SANIDAD FÍSICA Y EVANGELISMO
Mateo 8:16-17
Jesús hizo obras de sanidad desde el principio de Su ministerio. La sanidad física no trae salvación al alma, pero puede convertirse en una gran puerta para el evangelismo. Jesús tomó y llevó nuestras enfermedades y dolencias (Mateo 8:17). La primera obra de evangelización que realizó la Iglesia Primitiva fue levantar a un hombre que era cojo de nacimiento (Hechos 3:1-12). Las puertas de Samaria se abrieron a medida que los discípulos avanzaron por ese campo (Hechos 8:4-8). Los tres ministerios que Pablo emprendió estaban conectados a la sanidad (Hechos 13, 16 y 19). ¿Qué tarea debemos realizar en estos momentos para sanar a las muchas personas de nuestro país y del mundo entero que sufren enfermedades graves?
1. Tres tipos de plenitud (La razón)
Debemos explicar la razón por la cual las personas deben estar llenas de tres cosas. Todas las personas están atadas por los doce problemas de Satanás. Sólo podemos recibir sanidad al llenarnos del Evangelio. Sólo a través de la llenura del Espíritu Santo podemos revertir los doce problemas que se han establecido como lo grabado, raíces y naturaleza de las personas. La sanidad espiritual llega a través de la llenura del Espíritu Santo. Después recibimos sanidad del corazón o sanidad emocional. Nuestros nervios y células puedan sanar cuando nuestro corazón ha recibido sanidad. Este es el principio absoluto.
2. Enfermedades crónicas o terminales, enfermedades incurables y cáncer
Podemos encontrarnos con muchas personas en el campo que padecen enfermedades crónicas o terminales, enfermedades incurables o cáncer. Estas personas deben profundizar en la oración hasta el punto de que dejen de pensar en sus enfermedades. Para que esto suceda, es importante ayudarles a concentrarse en la Palabra mediante la transcripción o memorización de los versículos de la Biblia. Estas personas podrán superar todo lo que están pasando si alcanzan la cumbre espiritual a través de la oración concentrada. También deben buscar una sanidad profunda a través de ejercicios de respiración profunda. Asimismo, es saludable comer alimentos ecológicos, así como alimentos guisados o hervidos.
3. Testigos (La oportunidad)
Las enfermedades son oportunidades para que aquellas personas que están enfermas se conviertan en testigos y disfruten del verdadero Evangelio. También representan una oportunidad para experimentar el verdadero poder de Dios. Cuando transmitimos este mensaje de esperanza a las personas que están enfermas, sus vidas y perspectivas se renuevan y se ven a sí mismas bajo una nueva luz. Por último, entienden que Dios les está dando la oportunidad de ser levantadas como testigos.