LA OBRA DE LA PALABRA – EL MENSAJE DEL PÚLPITO
Mateo 28:18-20
Lo más importante en los encuentros que tengamos es que transmitamos la Palabra que Dios desea. Esta Palabra viva, cuando está obrando, se llama “mensaje”. Este mensaje es la primera condición del movimiento de evangelismo que debemos disfrutar. ¿Qué debemos ver a través del mensaje?
1. Cinco conceptos básicos
En primer lugar, está el Aposento Alto, que se centra en el movimiento de la vida de salvar a las personas no creyentes. El Aposento Alto significa hacer el movimiento de la vida que tuvo lugar en el aposento alto de Marcos. Segundo, el ministerio de equipo consiste en hacer la misión que Dios más desea a través de la Palabra. La casa de misión sana la vida de una persona por medio de la Palabra de Dios al vivir junto a otras. A través de la iglesia especializada, damos a las élites el mensaje de ser recreados por Dios. Debemos hacer que todas las personas de la región escuchen el Evangelio correcto al menos una vez a través de la iglesia regional. Este es el primer mensaje del movimiento de evangelismo.
2. Las personas que se reúnen
La razón (motivo) de quienes se reúnen en el aposento alto y la iglesia debe cambiar. Necesitan entender que no conocieron a Dios porque hubieran enfermado o se estuvieran enfrentando a dificultades, sino que ese fue sólo un método de Dios para salvarlos. Esto se llama gracia. La devoción por el evangelismo es también una gracia de Dios. Por eso, no tenemos más remedio que dar gracias. Es en el movimiento del Evangelio, o, en otras palabras, en el movimiento de la vida donde encontramos nuestra comisión.
3. Con Dios
La Salvación es que Dios esté a nuestro lado. El movimiento del RUTC es el movimiento de la Palabra por medio del cual la Palabra de Dios está obrando. Cuando salimos al campo con esto, experimentamos la salvación y el movimiento de vida de Dios, que está con nosotros. También podemos disfrutar el momento más feliz de experimentar la Palabra de Dios al concentrarnos. La comunicación de la Palabra se produce con Dios, con nosotros mismos y con otras personas. En medio de todo esto, vemos la obra de la Palabra y entendemos que Dios está con nosotros.
Oración del evangelista. ¡Señor! Permite que nos pongamos delante de Tu Palabra. Aunque tengamos carencias y seamos débiles, permite que nos pongamos delante de Tu gracia y poder, y que nuestra iglesia y campo sean avivados a través de nosotros.