TRES ESTABLECIMIENTOS - CONCENTRACIÓN
1 Corintios 3:16
Necesitamos un tiempo de concentración para cambiar aquellas cosas que llevan enraizadas en nuestro interior mucho tiempo. Las personas reunidas en el aposento alto de Marcos compartían esa característica. Encontraron su respuesta en las palabras de Jesús en el monte de los Olivos (Hechos 1:3). Se mantuvieron fieles a la palabra que se estaba cumpliendo, y oraron (1:14) y dieron culto constantemente (2:42). También testificaron que Jesús es el Cristo a diario (5:42). Estas obras se siguen levantando hoy en día (Romanos 16:25-27). ¿En qué deberíamos concentrarnos?
1. Establecer nuestra identidad
Moisés encontró su identidad gracias a la ayuda de Jetro. Necesitamos descubrir lo que Dios desea de nosotros. Dios usó a Moisés para la obra del Éxodo tal y como había establecido.
2. Establecer la misión
Necesitamos descubrir la misión a través de la identidad que Dios nos da. Para ello, debemos tener en cuenta el horario. Martín Lutero vio que el horario del Evangelio se había difuminado a lo largo de 1.500 años y descubrió la misión de la Reforma. Los milagros que se levantaron para Moisés, que conocía el horario de Dios, fueron obra de Dios. Por tanto, la misión consiste en buscar el horario correcto, ir a un lugar concreto (terrenos dorados de pesca, puntos ciegos, zona de desastre) y encontrar a la persona correcta (personas preparadas, que quedan, esparcidas, ocultas, aisladas, visitantes temporales). Este es el secreto de las respuestas que nos permiten tener victoria.
3. Establecer el evangelismo y las misiones
Nuestro evangelismo y misiones es el Movimiento RUTC (Centro de Entrenamiento para la Unidad de Remanentes). El primer movimiento del RUTC es el encuentro (Mizpa, Dotán, aposento alto de Marcos). El segundo movimiento del RUTC es el campo (Hechos 17-19). El tercer movimiento del RUTC es el campo oculto. Dios está obrando y dando respuestas dentro de este movimiento.
4. Conclusión - Tres cosas
Dios siempre obra si una persona con Evangelio prepara sus fundamentos, aunque sea un poco. Nuestro nivel, estándar y exigencia no podemos ser nosotros mismos, sino Dios. Nos levantaremos como las figuras principales que tienen victoria sin pelear si vemos que se cumple la corriente de la Palabra, la oración y el movimiento de evangelismo y cambiamos la corriente de nosotros mismos, la iglesia y el campo.
Oración del evangelista. ¡Dios! Permite que hoy sea el día en que nos concentremos en establecer nuestra identidad, comisión, evangelismo y misiones que nos has dado.