LO QUE DEBEMOS DISFRUTAR POR ENCIMA DE TODO – LA PALABRA

Hechos 1:3

Todo el gran conocimiento del mundo, los escritos de las personas más sabias y la información se transmiten a través de los medios de comunicación e Internet. Las personas buscan una vida plena, larga y de alta calidad a través de la información y el conocimiento que existe sobre la economía, la salud y la cultura. Sin embargo, esta gente ignora aquello que es crucial para su alma, que es lo más importante. ¿De qué cosas debemos disfrutar más como seres espirituales que somos?

1. Lo que contiene el Evangelio

El Evangelio contiene el misterio que solucionó todo para siempre. La mayoría de personas no puede vencer a Satanás porque vive sin este misterio. Si comprendemos este misterio, buscaremos otras cosas que Dios ha preparado: “el yo que Dios creó”, “el mío que Dios me dio” y “el campo que Dios me dio”. En ese momento descubrimos que la iglesia, los campos y nosotros estamos en medio de la corriente de preparación para esta época. David, que se preparó para la construcción del templo, fue un hombre que comprendió el misterio de estar dentro del Evangelio.

2. Lo que contiene la Palabra

La Palabra contiene el futuro que Dios creará. Recibiremos de un modo natural la bendición de que todo vaya bien si descubrimos y obedecemos la voluntad de Dios. Podremos superar todas las crisis simplemente con permanecer dentro del viaje del pacto. Lo más importante es transmitir el pacto que está en la Palabra a la siguiente futura.

3. Lo que contiene la oración

Nuestra oración contiene la alegría de la salvación. La oración es el misterio de entrar en la gracia de Dios, que gobierna el tiempo y controla el horario. Recibiremos verdadera sanidad si entramos en el poder infinito de Dios a través de la oración. El viaje del pacto comenzará y experimentaremos el poder de la Palabra si nos centramos en Dios con la oración de esta manera.

Oración del evangelista. ¡Dios! Permítenos encontrar lo que contiene el Evangelio, la Palabra y la oración para que podamos restaurar el poder de la concentración con el fin de vivir en la Palabra. Permite que nuestra vida forme parte del viaje del pacto.